Creo que nos han dado un capricho, el capricho de vivir, de saborear nuestra vida, nuestra historia, emociones, días, horas, minutos e incluso segundos, de ser libres, de vivir sin ataduras, de dejar que la brisa endulce nuestra alma.
La vida es tan bella como un eterno atardecer.

sábado, 2 de marzo de 2013

.

Nunca olvides tus triunfos, pero tampoco olvides tus fracasos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario